jueves, 25 de noviembre de 2010

Mi life.

De buen rollo, te acabo de decir que quiero pasar mi vida contigo.

Se ha echado a perder todo.

Tú alguna vez has tenido algún sueño? Pues yo si imbécil.

Contar estrellas sin más.

Tumbados. Estrellas.
- ¿Porque eres así?
÷ ¿Así como?
- Que cuando hablo contigo siento que nada mas importa, que con oir tu voz me bastaria. Que cuando estoy enfadada y estoy diciendo tonterias me haces callar con un beso. Que me dices esas cosas tan diferentes y bonitas que me hacen sentir especial y que cuando estoy contigo me siento la persona mas feliz del mundo porque te tengo a mi lado.
÷ Prometeme que te quedarás conmigo por mucho tiempo
- Para siempre.
÷ Te quiero,


Gran verdad.

Vivimos en un mundo donde nos escondemos para hacer el amor..
Pero la violencia es practicada a plena luz del día.

Paraíso.


En el silencio de mis reflexiones, pasan todos los minutos vividos. Recorren mi mente y mis pensamientos mientras más abajo, late un órgano con fuerza. Para el mundo no soy nadie, otra más, pequeña e insignificante. Para tu mundo, soy algo menos que un granito de arena. Mundos, vidas diferentes que se cruzan por razones inexplicables. Millones y millones de personas en este mundo, y a veces solo necesitas a una. Y en el paraíso, tu sonrisa perfecta. No exiten las guerras ni los complejos, ni los afanes de reirse de la gente. Por suerte o por desgracia esto no es el paraíso. Ese lugar pocas veces existe, a ese lugar solo podemos acceder con una felicidad máxima en un momento determinado. Yo llegué un día a ese paraíso. Vi tu sonrisa perfecta, Vi a las personas. Sin problemas, despreocupadas. Salí de alli con la cabeza agachada. Y hoy, sigo mirando mis pies mientras otros tienen la suerte de pasar por el paraíso. Los días pasan, y en la tierra aparecen los problemas, las tormentas. Después de la tormenta llega la calma. Pero parece que esta no quiere amainar. Está durando bastante. Ya no llega la calma. Desde hace meses no veo el paraíso, no paso por allí y han desaparecido las esperanzas de hacerlo. No busco la felicidad máxima, solo algo que me haga sonreir.
¿Que hacer cuando hasta tu mismo has perdido la confianza en ti? Solamente.. recordar el sabor de la felicidad.

miércoles, 24 de noviembre de 2010

Una simple ciudad, una simple ilusión.














Un día, 14 de febrero. Estaba en un parque, sentada. No tenía nada que hacer. No había nadie a mi lado para desearle un feliz san valentin, ni susurrarle un te quiero. Me puse a pensar. El rocío del césped mojaba mi pantalón. ¿ Y que más da? Me tumbé, quería sentirme viva. Estaba empapada pero me daba igual. Era feliz. Me quité el gorro y peiné mi pelo húmedo. Cerré los ojos y por un momento.. te vi. Te echaba de menos pero al recordarte, era simplemente yo. Tú sacaste esa sonrisa de mi interior. Me tumbé de nuevo. Parecía estar lloviendo, abrí los ojos. Sí, estaba lloviendo. Me levanté y corrí. Canté y bailé. Chillar, para aquello.. se quedaba corto. Cruzé la puerta de ese parque, de aquel Centra Park en Nueva York. Uno de mis sueños, se cumplió. Cuando por primera vez vi aquella ciudad, soñé con vivir allí, y aquí estoy. Pero también llegué aqui para encontrar el amor, y me han fallado muchas veces. Pero bueno esa es otra historia. Llegué a mi ático, el piso perfecto. Me preparé la cena y me di una ducha. Algunas personas dicen que esos 1440 minutos del día, los aproveché. Otras, que estoy loca. Pero déjame que te cuente un secreto, las mejores personas lo están. 


                                            
             
                  "Quiero decir que esta ciudad es mucho. Y que mi experiencia allí es increíble. Es algo que nunca se olvida"

martes, 23 de noviembre de 2010

Los sueños, sueños son.

En una tarde de esas aburridas, harta de estudiar cogo mi ipod y me tumbo en mi cama. Empieza a sonar la música, canción tras canción. Los parpados me pesan, no puedo aguantar más. Boston, de Augustana. Mi canción favorita. Nuestra canción. Donde no haya nadie, te esperaré. Los dos solos. Los ojos se me cierran más y más. Entro en un relajante sueño mientras me vienen a la mente millones de momento junto a ti.
De repente, noto tu olor. Noto que me estás besando. Estás ahí, conmigo. En mi cama tumbados. Coges un auricular y te lo pones. Sonries al escuchar esa canción y me susurras dos simples palabras. Todo es perfecto. Me das la mano y me abrazas. Nos quedamos abrazados hasta que la canción termina. Sin saber qué decir, me das un ligero beso en la frente y bajas hasta mis labios. Por una milésima de segundo, nuestros dientes se juntan. Nos miramos y sonreimos. Estoy feliz. ¿ Puedo pedir más? Estás a mi lado, con eso me basta. Te quedas toda la noche, pasan horas y horas y no me canso de ti. Me das un beso en la mejilla y me dices bajito al oído un te querré siempre. Y entonces, despierto. Apago el ipod y sigo estudiando.

lunes, 22 de noviembre de 2010

Un día cualquiera.

Una calada. Nerviosismo, tranquilidad. Andando cada vez más rapido. Respido. Pienso. Todas las veces que me han echo reir. No se porqué, me rio sola en este mismo instante.Miradas hacia mí, observación constante.La segunda calada, más tranquilidad. Menos agobio. Miro hacia el frente, todo lo que me rodea y me doy cuenta de que ya todo es distinto, nada me recuerda a ti. Soy feliz aunque siempre falta algo. Otra calada, el humo baja por mi garganta. Ando sin ganas..sin rumbo alguno. Deseos, obsesiones. Me invaden. Recuerdos de todo aquello que quise y no pude tener. De todo aquello que alguna vez ignoré. de cosas que jamás volverán. Se va acabando poco a poco. Las caladas se agotan, igual que las oportunidades. Cuarta calada, más intensa que las otras. Respiro profundamente. Dar gracias es lo que me toca, por tener todo lo que tengo. Calada más calada se va gastando, me voy agotando lentamente. No puedo avanzar, me es imposible. Las oportunidades se van destrozando. Me estoy consumiendo lentamente como un cigarrillo. Ultima calada, intensa pero relajante. Llego a mi parada. La número 2. Lo tiro, lo piso y se apaga del todo. Me siento, espero a mi autobús. Y mientras, aparece la media sonrisa.

Impotencia.

Explicar como me siento?
Es algo así como..insignificante? Sí, eso. Insignificante.
Mi alrededor, lleno de personas felices. Cantan, hablan. Y yo aquí tirada en un rincón, sola. La primera lágrima llega hasta mi mejilla. Y baja. No siento nada desde hace tiempo. Me he quedado sola impregnada en mis sentimientos de cuento de hadas. Tengo miedo. Pero no quiero mostrarlo. Sí, me creo fuerte. Me creo fuerte para no sentir dolor. No me sale ni la sonrisa fingida y es que estoy harta.. 
Estoy harta de llegar a mi casa llorando sin motivo. De inventar con ilusión mi mundo y que luego llege un extraño y me lo rompa diciendo un te quiero falso. Harta de que mis padres se piensen que soy perfecta y que luego se den cuentan de la cruda realidad, y me castiguen. Harta de hablar y que nadie me escuche. De hacer algo y que no tenga sentido. De pasarme todas las noches sin dormir y después llegar a clase como si nada hubiese ocurrido. La vida es un teatro sí, pero yo no encuentro mi personaje. Odio que la gente me mire, odio llegar a un sitio nueva, ver una película sin contarle el final a todos. Sonrio cuando estoy enamorada y lloro cuando mi amor desvanece. Me pasaría horas y horas bailando bajo la lluvia si no llegara después el resfriado. Me puedo llegar a tirar dos días enteros sin dormir. Sé escuchar y me gusta hacerlo. Intento ayudar en todo lo que puedo y me encanta escribir. No soy perfecta y odio mis defectos. Soy así y si no te gusta no hace falta que falsees. Y si no te importo, dilo. Que me da igual.Ya no se cómo reacciones a nada. Me duele todo, hasta el más mínimo detalle. Estoy perdiendo amigos y me siento impotente por no saber qué hacer. Ya no sueño, porque no puedo dormir. Mis ilusiones se hunden sin saber como. Me siento como si fuera un hielo más en tu copa y no me gustan los cambios, pero los estoy teniendo sin querer.